Entender el proceso y la dinámica de los chicos cuando están en el deporte es muy importante: del por qué algunos más que otros están mas motivados, otros asisten y son más atraídos por la parte social, entender el por qué algunos no progresan y claudican es importante.

A continuación, un valioso articulo de Chema Buceta al respecto, en el cual nos ilustra sobre algunas razones por las cuales se pueden dar estos retiros y lo valioso que es para el Club o equipo conocer estas decisiones para prever en el futuro estas situaciones

EL QUE NO ESTA EN LA FOTO, NO SALE

Es imposible que un niño deportista llegue al deporte de resultados (elite) si abandona el deporte. Es sabido y conocido, pero se olvida a menudo. El que no esta en la foto, no sale; y muchos jóvenes abandonan el deporte que tanto les encantaba cuando comenzaron, por que ya no les divierte; es más, les estresa, les agobia, les resulta una tortura. Chicos quemados. También están otros que sin embargo no se retiran porque están atrapados: es lo que han hecho siempre, lo único que hacen mínimamente bien, sus únicos amigos son los del deporte, quizás se sentirán fracasados si lo dejaran…. Y, sobre todo, no se atreven a decir a sus padres que quieren abandonar. ¡Asi de cierto! Muchos pasan por lesiones que se prolongan mas de la cuenta o hallan otras excusas hasta que ¡por fin! Encuentran la ocasión y el valor para retirarse.

Cuando un joven abandona, no se suele analizar el proceso que lo ha provocado. Puede ser, simplemente, que el deporte ya no le satisface como antes por que no es lo competente que le gustaria y aparecen otros estímulos: actividades que le proporcionan una gratificación emocional mayor. Pero en muchos casos, sobre todo si se trata de deportistas con talento, forzar la maquina antes de tiempo, priorizando los resultados a corto plazo sobre el divertimiento, la exigencia progresiva, sentirse competente, socializar con otros chicos, etc. Provoca emociones negativas permanentes que precipitan el abandono de quienes, llevados de otra manera, con inteligencia y conocimiento, quizás podrían haber llegado a la elite del deporte. Por tanto, un objetivo fundamental, el mas prioritario de todos, es que los muchachos que practican deporte sigan haciéndolo, que su motivación por la actividad deportiva se fortalezca y no abandonen, que quieran seguir en el deporte con el entusiasmo y pasión que este requiere.

(Fragmento del libro “Mi hijo es el mejor, y además es mi hijo”, dirigido a padres de deportistas jóvenes y recomendado a entrenadores, directivos, psicólogos y quienes tienen responsabilidades en el deporte de base y escrito por el Psicólogo Juan Maria Buceta)